jueves, 14 de abril de 2016
HACERSE VIEJO NO ES APTO PARA LOS DE CORAZÓN TEMEROSO
Cuando tu mujer se despierta y la mitad de ella se ha vuelto de un color escarlata y le pica horrores, sabes que cualquier plan que tuvieses para ese día va a tener que cambiar. Y cuando una de tus muelas empieza a palpitar rítmicamente dentro de tu boca, como un martillo neumático, y no hay dosis de paracetamol ni penicilina que arregle nada, sabes también que puedes despedirte de cualquier plan que tuvieses para la semana, e incluso de dormir por las noches.
Sue Illsley, pastora de DCI, dijo con reflexiva simpatía, "Hacerse viejo no es apto para los de corazón temeroso", deseándonos una pronta recuperación y se fue para disfrutar una semana de vacaciones en Grecia.
Esa semana también tuvimos un inesperado fallecimiento familiar que puso fin prematuramente a un curioso cuento que todavía desafía la imaginación, el cual podéis disfrutar leyendo, aquí.
Mientras tanto, nuestro hijo mayor, James, 44, que tiene varias discapacidades crónicas, ha comprado un pequeño velero de 24 años. Esta semana decidió navegar solo desde Troon cerca de Glasgow, en la costa oeste de Escocia, hasta el Canal de Caledonia, para después volver hacia su casa en Inverness. En esta era de teléfonos con cámara y WhatsApp en la que nadie sufre solo, fuimos testigos de tormentas inminentes, de olas que se abalanzaban sobre el barco y del agujero en un costado del pobre yate después de que algo lo atravesase. Nos pusimos los chalecos salvavidas.
Después de unos días de oración, pastillas y perseverancia, Pilar ahora solo está de color rosa y mi facilitador de oración nocturna, es decir mi muela, tiene una cita providencial con Tracey, nuestra dentista. El duelo familiar se ha convirtiendo en celebración por una vida extraordinaria, el barco flota ahora tranquilo en el lago Ness y James ha llegado a tiempo para ingresarse en el hospital en Inverness.
Hacerse mayor puede que sea inevitable, pero tener el corazón temeroso no es en ningún caso una opción. Como nos recordamos continuamente, "Si nosotros no podemos ir, por amor a Dios mandemos a algún otro en nuestro lugar." Aún así, ¿verdad que no nos tendrás en cuenta que queramos tener una semana un poco más tranquilo?
Les y Pilar
© Esta imágen libre de derechos fue suplida por Creative Commons y Flickr: OMG by James Vaughan On Flickr.
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